-ARTÍCULO- Pesadilla en Navidad
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El pasado fin de semana, mientras paseaba por el centro de la ciudad, observaba los escaparates y las decoraciones navideñas de tiendas y calles recién inauguradas. Embelesada por ese ambiente consumista, me parecía oír de fondo la canción del anuncio del sorteo del gordo de navidad. A tal punto llegaba mi ensimismamiento navideño.
Sufriendo los agobios tan típicos de la época, son malos días para los indecisos, pensé, entre tanta marabunta de accesorios, regalos, iluminación… ¿qué decoración voy a poner este año? Comienza la pesadilla.
De mi infancia recuerdo como los espumillones de todos tamaños, colores y formas se colocaban por casa con muy buena intención, sin más. Y duraban año tras año como gallinas desplumadas…la exaltación de la navidad más inocentemente hortera. Había una tendencia común en los hogares a ese “totum revolotum” que envolvía nuestra casa cual papel de celofán.
De mi infancia recuerdo como los espumillones de todos tamaños, colores y formas se colocaban por casa con muy buena intención, sin más. Y duraban año tras año como gallinas desplumadas…la exaltación de la navidad más inocentemente hortera. Había una tendencia común en los hogares a ese “totum revolotum” que envolvía nuestra casa cual papel de celofán.
Bye bye ingenuidad, ahora la potente industria del mundo decoración no se quiere perder este suculento banquete: adornos para una navidad glamurosa, rústica, nórdica, anglosajona, tradicional, minimalista, barroca…brillantinas, luces, oro, belenes, plata, árboles, cascabeles…
Para no caer en este bucle sinsentidodecorativonavideño, es mejor pararse y pensar. Seguir unos sencillos pasos, nos ayudará a visualizar nuestro objetivo y disfrutar del momento de decorar nuestros hogares:
-Sacude el polvo; saca del armario todos los adornos navideños, incluso los más antiguos…nunca se sabe que puede ser tendencia los próximos años.
-Selecciona y ordena; los adornos que aún nos pueden sirven, hacer descartes con los inservibles o con los que posiblemente no vuelvas a usar. Es decir, hacer limpieza.
-Selecciona y ordena; los adornos que aún nos pueden sirven, hacer descartes con los inservibles o con los que posiblemente no vuelvas a usar. Es decir, hacer limpieza.
- Elige; por tonos, estilos o textura la decoración navideña de este año.
-Ahora es el momento; toca comprar los adornos que nos vayan a acompañar al estilo de decoración de este año y retoca aquellos adornos tan bonitos de los que no te quieres deshacer.
-Diviértete; ya estamos listos para crear nuestros ambientes y distribuir la decoración.
Un último consejo: apuntar en un folio la decoración elegida este año. Ventajas: recordar el estilo y adornos que pusimos en años anteriores y aprovechar todos los adornos que tengamos escondidos y olvidados en el fondo del armario.
Felices Fiestas
¡Saludos LaMusaManíacos!
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